lunes, 13 de abril de 2009

EL SOL, 100% ENERGÍA

Por Ana María.




La energía producida como resultado de reacciones nucleares de fusión en el sol, llega a la Tierra a través del espacio, esta energía llamada fotones interactúa en la atmósfera liberando calor en la superficie terrestre la cual es absorbida y luego la liberada durante la noche.
La transformación de la energía del sol en forma natural a diferentes sistemas que favorecen el aprovechamiento de ella es diversa, como por ejemplo el calentamiento atmosférico que permite la sobrevivencia humana, la oceánica y la de las plantas. La tecnología está presente en el aprovechamiento de los vientos producidos por las interacciones entre la energía solar, los océanos y la atmósfera, utilizado durante siglos en Holanda y España, hoy en todo el mundo, hablamos de los molinos, en nuestro país podemos encontrar la energía eólica en el Norte de Chile, se utilizan para ello hélices de gran resistencia y duración, con diseño aerodinámico que, al unirse a generadores produce electricidad en determinadas localidades o región.

El movimiento de las corrientes que se producen por el ciclo del agua, efecto de los cambios atmosféricos producidos por la energía solar, se aprovecha gracias a las turbinas modernas en las centrales hidroeléctricas
La diferencia entre estas energías se manifiesta como energía mecánica (para mover una turbina, por ejemplo), que puede conectarse a un generador, para producir electricidad. Estos sistemas, llamados sistemas de conversión, requieren enormes intercambiadores de energía y otros aparatos todos logros de la tecnología. Pero, los llamados colectores de energía solar o recogida directa de aprovechamiento térmico para sitios de investigación, viviendas particulares, empresas o de esparcimiento como piscinas, o de estética, requiere dispositivos artificiales diseñados para concentrar los rayos del Sol que se emplea en procesos térmicos para calentar un gas o un líquido que luego se almacena o se distribuye. En los procesos fotovoltaicos, la energía solar se convierte en energía eléctrica sin ningún dispositivo mecánico intermedio. Los colectores solares pueden ser de dos tipos principales: los de placa plana y los de concentración. Los primeros se han usado de forma eficaz para calentar agua y para calefacción.

Los sistemas típicos para casa-habitación emplean colectores fijos, montados sobre el tejado y son capaces de calentar hasta 82 ° C en cambio los segundos se usan para aplicaciones como el aire acondicionado, la generación central de energía y de calor para cubrir las grandes necesidades industriales. Los hornos solares son una aplicación importante ya que son ideales en la investigación de materiales libres de contaminantes. ¿Y qué sigue? Un proyecto futurista, producir energía a gran escala gracias a módulos solares en órbita alrededor de la Tierra. ! Pero tendrían un peso de más de cuatro toneladas.

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